Afrodisíacos naturales

Publicado: 27/11/2008 - Actualizado: 28/02/2020

La naturaleza ha puesto a nuestra disposición potentes afrodisíacos. La palabra afrodisíaco es un sustantivo que se aplica a aquellas sustancias que poseen la propiedad de estimular o aumentar el apetito sexual. La palabra surgió del nombre de la divinidad femenina griega llamada Afrodita, hija de Urano, a quien Cronos extirpó los órganos sexuales los cuales cayeron al mar y engendraron a la diosa del amor erótico.

Los afrodisíacos están relacionados con el amor, la fecundidad y la energía. Ya desde la antigüedad se decía que ciertas plantas, flores o hierbas, cuya forma natural se parece a los órganos sexuales, servían para estimular el apetito sexual.

También se pueden encontrar en las frutas y las verduras, símbolos fálicos como la banana, el pepino, la berenjena o los espárragos, y también los símbolos vaginales como las ostras, o las almejas. La anatomía de las frutas como las peras, las papayas o el aguacate se asocian también con los contornos de los órganos sexuales

Afrodisiacos en la comida

En la cocina, se dice, es donde empieza el arte de la seducción, pues los expertos en el tema bien saben que el secreto para que un platillo seduzca todos los sentidos, esté, entre otras cosas, en la energía con la que se carga el alimento.

Otro de los secretos para que un alimento seduzca, son, somo muchos saben, las hierbas afrodisíacas, entre las cuales podemos encontrar la ortiga, el apio, la albahaca, el ginseng, la canela, la albahaca, el chocolate y hasta el ajo. El arte de cocinar con afrodisíacos con fines de seducción no es algo nuevo, por supuesto (1).

Frutas y verduras afrodisíacas: el apio es una de las plantas afrodisíacas más conocidas, ya que contiene un considerable nivel de feromonas, sustancia afrodisíaca por naturaleza. Agregar apio crudo con un poco de betabel a las sopas o ensaladas, puede ser el comienzo de una invitación al placer (2).

El ginseng es una planta medicinal afrodisíaca, la cual aumenta la energía y vigoriza el ánimo sexual. Hay que tener cuidado a la hora de adquirir esta planta pues no siempre es de calidad.

La albahaca es una planta afrodisíaca con gran tradición, en la antigüedad fue consagrada a Venus y en la india a Vishnu.

El borojó es una frutita afrodisíaca del norte de Sudamérica, el cual contiene un alto valor en aminoácidos, que es utilizado muy a menudo en preparaciones vigorizantes.

El chocolate: los aztecas empleaban el chocolate para estimular y engrandecer su apetito y satisfacción sexual; el chocolate tiene propiedades que estimulan las endorfinas y vigorizan la sensualidad. Las trufas, por ejemplo, son altamente afrodisíacas (3).

La Carqueja: es una planta medicinal silvestre, la cual tiene entre sus cualidades que cumple las mismas funciones que el viagra (estimulante sexual masculino), y es menos riesgosa que este medicamento.

Pistacho: esta riquísima semillita que es mu usada como botana, aperitivo y entrada, tiene altas propiedades afrodisíacas.

Canela: la canela es una especie que se a usado desde hace muchísimos años para crear un ambiente sexual y estimular pasiones.

Excitación en la mujer y el hombre

Existen muchas formas para conseguir la excitación de un hombre o de una mujer, y tanto la erección como la humedad vaginal son necesarias para disfrutar enteramente del acto sexual. Dar un masaje, por ejemplo, con aceites de esencias eróticas como la canela, la ortiga, la albahaca, etcétera, puede resultar muy eficaz, y si el masaje es lento, despreocupado, y quien lo da va paseando sus manos por todos los rincones del cuerpo, el placer puede ser altamente satisfactorio.

Para estimular el apetito sexual masculino, existen interesantes opciones como la de preparar una infusión de menta sazonada con pimienta, y contra la impotencia o la falta de deseo sexual, la sabiduría y experiencia de las plantas recomienda emplear un poco de infusión de ortiga endulzada con miel.

Y por último, recuerda que uno de los principales órganos erógenos es el cerebro, es de aquí de donde parten todos los estímulos sexuales y de donde nace el placer. Así que si quieres un afrodisíaco realmente poderoso, no olvides, además, aprender poco a poco a conocer a tu pareja, a saber lo que le excita y lo que no le excita, a leer sus mensajes silenciosos que no la estimulan y a preguntarle abiertamente, si esto te apetece, lo que le gustaría. Se paciente y juega el juego de la conquista, y ve aprendiendo a ser lo suficientemente creativo para despertar las fantasías eróticas de tu pareja, no con frases no sinceras ni Clichés, no diciendo cosas que  no sientas, se espontáneo y sincero,  y no olvides, sobre todo, que el arte del placer y sus mieles más dulces se consiguen con el aprendizaje (3).

Revisado por: Dra. Loredana Lunadei el 28/02/2020

Acerca del autor
  • Laura G. Garmendia

    Articulista, conferenciante y reconocida experta en todo lo referente a remedios naturales, terapias alternativas y cómo llevar una vida saludable en plenitud. En Salud Natural nos ofrece su sabiduría y consejos, a través de los cuales podemos descubrir nuevos planteamientos de vida y formas de enfrentarnos a nuestras enfermedades y padecimientos. En sus artículos encontrarás experiencias, tips y consejos que te ayudarán en tu vida diaria. Este es su Linkedin.