Lunares Peligrosos: Cómo reconocerlos por su color y forma

Publicado: 21/08/2014 - Actualizado: 10/10/2018

Si bien los lunares otorgan un sello especial a nuestra personalidad y dependiendo de dónde se ubiquen pueden ser incluso hasta sexys, no siempre son inofensivos, hay ciertos lunares que pueden afectar seriamente nuestra salud, es por ello importante que aprendamos a detectar a aquellos lunares peligrosos que pueden significarnos un riesgo maligno, ligados a un cáncer de piel.

Qué son los lunares

Primero hay que saber qué son los lunares y a qué se debe su aparición. Los lunares son crecimientos en la piel que pueden ser manchas o pueden tener también elevaciones. Aparecen cuando las células que producen los pigmentos crecen en grupos.

Características de los lunares

Los lunares pueden ser de color rosado, marrón y hasta negro, pueden ser carnosos, pequeños o grandes. Pueden saltar a la vista o estar en zonas muy ocultas de nuestro cuerpo. Antes se pensaba que nacíamos con un determinado número que conservábamos hasta nuestra muerte, sin embargo se conoce que pueden seguir apareciendo a lo largo de nuestra vida.

Prevenir e identificar los lunares peligrosos

No se trata de sembrar pánico, sino de prevenir antes que lamentar, es importante que observemos que los lunares no cambien en el transcurso de aparición, no sólo de color, sino también de forma y tamaño.

Es importante identificar y poner mayor cuidado a los lunares oscuros, negros intensos. Recuerda que hay dos tipos de lunares los benignos y malignos conocidos como melanomas, éstos últimos son tumores cancerígenos de la piel, que no pueden ser detectados por sensaciones, es decir no pican, no arden y no duelen, es importante que los observes.

Asimétricos

Si observas que un lunar tiene forma asimétrica (sin forma definida), se ve como partido en dos mitades que no son iguales, debes acudir a un especialista, sin dudar, puede que sea un melanoma. Normalmente la mayoría de lunares que no representan problema alguno son esféricos o circulares.

Bordes irregulares

Si notas que tu lunar presenta bordes no definidos, por lo que no se diferencia dónde nace, también es preciso que lo consultes con un médico, puede ser un lunar de alto riesgo para tu salud.

Color

Los lunares que no son un peligro de cáncer, tienen un color, que es parejo desde su origen hasta su fin. Si detectas que tu lunar tiene un color en una parte y otros colores también al interior que se diferencian por ser claras y otras más oscuras, debes visitar a un especialista es muy posible que se trate de un lunar maligno.

Tamaños

Los lunares deben mantenerse de un solo tamaño. No deben crecer, si observas que un lunar crece, es urgente que acudas a un médico especialista en dermatología.

Lunares curables

Si detectas a tiempo o tempranamente estos lunares es posible que se encuentre una solución al problema de salud. Vale resaltar que un lunar puede cumplir con todos los factores de riesgos descritos y en esos casos son más peligrosos y urgentes de atender.

Es necesario por ello que observes cuidadosamente tu piel y diferencies lunares, manchas de nacimientos y pecas de los melanomas.

Exposición al sol

Sabías que si no usas bloqueadores o protectores solares y te expones frecuentemente a los rayos solares, puedes fomentar la aparición de melanomas. Actualmente esa es la forma por la que muchas mujeres y hombres vienen contrayendo cáncer de piel.

Otros factores

El factor genético es otra causa de riesgo para la aparición de melanomas y cáncer de piel. Si tienes antecedentes familiares, de personas de tu entorno familiar que han sufrido de cáncer de piel, es importante que lo pongas en conocimiento de tu médico, a fin de que te realicen chequeos y exámenes preventivos.

De acuerdo a los especialistas, son más las personas de piel muy clara las afectadas con este mal.

Revisa tu cuerpo

Una de las recomendaciones de los médicos es que pongamos mucha atención a la piel en todo nuestro cuerpo. Hay que revisar la cabeza, la cara, también el cuero cabelludo, el pecho, las piernas, el vientre, detrás de las orejas, los brazos, mejor aún si nos ayuda otra persona de confianza o usando un espejo grande para alcanzar ver la zona de la espalda. No hay que olvidarnos de los pies, los dedos, nuestras axilas y hasta los genitales a los que muchas veces no prestamos atención.

Tampoco se debe dejar de lado la revisación de las uñas y los dedos, la planta de los pies, las axilas y los genitales externos.

Personas de riesgo

No podemos generalizar pero se ha encontrado una mayor incidencia de melanoma en mujeres entre los 40 y 50 años de edad. Asimismo según estadísticas no oficiales pero referenciales los lunares peligrosos se ubican en el rostro, esto debido a que es una zona donde los rayos del sol afectan más fácilmente.

Respecto a los hombres, los lunares peligrosos hallados estuvieron en la parte superior de sus espaldas.

Revisado por: Dra. Loredana Lunadei el 10/10/2018

Acerca del autor
  • Sally M. Aiquipa

    Licenciada en Comunicación. Periodista especializada en medicina natural y terapias complementarias. En Salud Natural nos descubre las propiedades y beneficios de los alimentos y productos que la naturaleza pone a nuestra disposición. Este es su perfil en Linkedin.