Hiperactividad e Hipercinesia: la raíz de la verdadera curación

Publicado: 23/01/2014 - Actualizado: 10/10/2018

Se le llama hipercinesia al aumento de todos esos movimientos del cuerpo que eran voluntarios pero que se han vuelto involuntarios, como los tics.  Se suele atribuir este término también a la hiperactividad que, debe aclararse, no es una enfermedad, sino un problema de conducta y manejo emocional.

¿Qué es la hiperactividad o Hipercinesia?

Los tics o movimientos involuntarios se deben a que el centro regulador de los movimientos (sistema extrapiramidal o centros basales) se daña, por lo que la persona pierde el movimiento voluntario de su cuerpo y su organismo se mueve con movimientos rápidos sin que la persona pueda tener voluntad o dominio sobre ellos.

Se suele atribuir este término también a la hiperactividad que, debe aclararse, no es una enfermedad, sino un problema de conducta y manejo emocional, la cual se presenta por lo general los niños que son muy activos y no pueden controlar sus reacciones ni su concentración, y que presentan las siguientes conductas:

  • No pueden estarse quietos ni seguir instrucciones
  • No se concentran en sus tareas
  • Tienen por lo general bajo rendimiento escolar
  • Son rebeldes en ocasiones
  • No pueden ser empáticos con su ambiente
  • Tiene problemas para relacionarse con su ambiente, con sus padres, hermanos o compañeros
  • Son competitivos

¿Qué hacer en caso de hipercinesia o hipratividad (THDA)?

Tratar los tics y la hiperactividad pueden ser dos caminos muy diferentes. En el caso de los tics, existe un problema del sistema nervioso el cual puede atenderse con dieta y trabajo emocional, y en el caso de la hiperactividad se trata más bien de aprender un nuevo manejo emocional en los niños y jóvenes, y se debe hacer énfasis en que los padres tienen una influencia fuerte en dicha curación.

Tics

En el caso de los tics, se debe trabajar con la persona en cuestión emocional, los daños del sistema nervioso pudieron ser causados por medicamentos excesivos, drogas, mal manejo de ansiedad o angustia, miedo, emociones controladas o mal entendidas como la ira, etc. Todo esto nos indica que un tic tiene una causa profunda, la persona no siente tener dominio sobre sus “movimientos” en la vida cotidiana, o hay miedos ocultos que poco a poco se interpretan por el cuerpo en un sentimiento de impotencia y de no poder tener influencia sobre aquello que nos afecta. Las drogas pueden resultar un buen recurso para aislarse del mundo o provocarnos estados de felicidad pasajera, pero como bien es sabido, las drogas generan una química en el cerebro que poco a poco puede ir destruyendo o deteriorando importantes funciones.

En este caso, hay que seguir una dieta reconstructiva del sistema nervioso, beber jugos de vegetales frescos tres veces al día, incluyendo nopal o aloe crudo, zanahoria, brécol y ramitas de perejil bien lavados y crudos. Además, se debe beber en ayunas agua tibia con limón para ayudar a desintoxicar el cuerpo e incluir omegas en la dieta que vienen en la chía, aceite de oliva extra-virgen, pescado, etc.

Hiperactividad

En el caso de niños hipercativos, se debe atender la situación con delicadeza y paciencia. Se debe evitar los castigos, regaños y conductas agresivas hacia los niños, esto solo empeorara la situación. Se debe entender que un niño hiperactivo puede estar siendo un gran mensaje de reflexión para los padres y maestros, quienes intentan muchas veces dominar cosas que no queremos o nos gustan, y al no saber cómo lidiar con esto en uno mismo viene la desesperación de no poderlo hacer con los niños. Hay que mantener platicas y acuerdos con los niños, si el padre se siente desesperado y enfadado con esta conducta, solo se empeorara más y el niño la acentuara más. Hay que trabajar primero con el enojo y ansiedad del padre, tampoco se trata de ser permisivos, sino firmes, pero con entendimiento.

En ambos casos, tanto en la hipercinesia como en la hiperactividad, se debe considerar una actividad de relajación, como yoga, taichi, arte marcial, etc. Estas personas y niños necesitan de una actividad que los libere del exceso de energía y les ayude a tener un poco mas de contacto consigo mismos. También se recomiendan terapias como la digitopuntura, reflexología podal e incluso el masaje de psico-bioenergia, el cual ayuda no solo a relajar a la persona sino que si es un buen terapeuta nos ayudara en el manejo de miedos, tensiones, enojos, etc.

Practicar respiración abdominal

La practica de la respiración abdominal es un excelente método para ayudar a estas personas a manejar estrés y otras emociones. En los niños resulta muy eficaz, pero se debe recordar ser paciente con el niño y enseñarle por medio del juego, los niños hiperactivos aprenden muy bien si se capta su atención mediante algo que en verdad les guste y les atraiga (como deberia de ser en todas las personas). Este tipo de respiración captara la atención del niños en momento presente y aprenderá a relajarse. PAra esto, solo hay que enseñarle a inflar su abdomen cuando respira y a contraerlo cuando el aire sale. Poner la mano encima del abdomen ayudara a que el niño ponga atención en el movimiento y se relaje.

Ayudarse con algunas plantitas que relajan también funciona. La belladona, la pasiflora, la manzanilla, etc, ayudara a los niños a sentirse mas tranquilos. Hay que evitar los medicamentos fuertes que solo dañan los riñones a la larga y no trabajan con la causa esencial del problema.

Revisado por: Dra. Loredana Lunadei el 10/10/2018

Acerca del autor
  • Laura G. Garmendia

    Articulista, conferenciante y reconocida experta en todo lo referente a remedios naturales, terapias alternativas y cómo llevar una vida saludable en plenitud. En Salud Natural nos ofrece su sabiduría y consejos, a través de los cuales podemos descubrir nuevos planteamientos de vida y formas de enfrentarnos a nuestras enfermedades y padecimientos. En sus artículos encontrarás experiencias, tips y consejos que te ayudarán en tu vida diaria. Este es su Linkedin.